LA FIRMA DEL SULTÁN

Firme lo que firme,
no me puedo equivocar,
ya he firmado solo
la Equivocación.

Por firmar,
firmé,
con mi especial firma,
la firma del Satán,
la destrucción de Irán.

Ahora pasan la raya
y el garabato encorbado
de las hermanas gemelas
destruídas por el cielo
y la Santísima Trinidad.

Parad, parad, parad
la India toma posición,
el taller reparador,
mi firma de demonio,
el monstruo de la locura,
el pastel de la ONU,
y la historia de Salgamundi.

Sistema infinito
que es irreversible
infinitamente pequeño
el niño Irving del capitalismo
positivo en New York.

Si es verdad
que la Nasa descubrirá
al bicho del culo.