LA GRACIA
Don sobrenatural y gratuito que Dios concede al hombre en orden a la vida eterna. Se divide en gracia actual, influjo transitorio de Dios, y gracia habitual, don divino, infuso de una manera permanente en el alma. La gracia habitual es llamada también santificante o justificante, porque por ella el hombre se inscribe en la vida sobrenatural de los hijos adoptivos de Dios y sus buenas acciones le hacen acreedor a la vida eterna.
LAS GRACIAS
Nombre dado a las tres hijas de Zeus y de Eurinome, llamadas Aglaé (el esplendor), Eufrosina (la dicha) y Talía (la prosperidad) dispensadoras de gracias a personas y cosas y símbolo de la belleza que alegra al mundo. Formaban parte del cortejo de Venus y eran amigas de las musas. Tema de la escultura y pintura clásicas y muy del gusto del Renacimiento se las representa en forma de jóvenes y esbeltas muchachas, desnuda o ligeramente cubiertas de velos, que sirvieron de temas a telas de Rafael, Tiziano, Rubens...
Y EL GRACIOSO
Personaje indispensable en el teatro clásico español que representaba papeles de carácter festivo. Posiblemente hizo su primera aparición en la comedia Himenea de Torres Naharro en el s. XVI. Sus antecedentes pudieron ser el simple de las obras de Juan del Encina y el bobo de los pasos de Lope de Rueda. Pero fue Lope de Vega quien completó y perfeccionó el tipo, haciéndolo gracioso, ingenioso, sutil y capaz de resolver los enredos más complicados. Con la introducción del gracioso en las obras dramáticas se consiguió paliar la tensión de éstas, dando un respiro al espectador y acentuando, por contraste entre lo cómico y lo dramático, el valor humano de la representación.
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