LUCHA DE GÉNERO Y ABORTO VII

Se está produciendo una sublimación del sexo en la Creación que preveía Teilhard de Chardin, ya no será una coartada fatal de nuestro origen, ni se utilizará para manipular, será la resultante de una ofrenda de amor, reproducirse porque nos queremos, no es algo aséptico de pareados asonantes por lo familiar.

Los hijos no serán la resultante de un revolcón de reviernes, ni llevarán la pareja a la reyerta, no serán matrimonios resultados de la triste estrategia de las familias políticas, sino fruto de una palabra juglaresca, un beso, una rosa, de la literatura y los libros, no de leyes y mandatos del aparato político.

Los cuentos de los niños son literatura, las nanas son cuentos y cancioncillas orales, los cuentos de la política son corruptelas que conducen a la guerra, y el amor sale de las casas pobres, porque la literatura va a los palacios a consolar a los poderosos y los reyes, lo mágico está en la calle y en todas partes y las profecías se recogen en las mallas de la literatura y no en un informe de estadista gélido.

Y si un papá en el "xilosofar" de la noche le dice a su niño que estuvo nueve meses en la barriguita de mamá antes de salir y que tuvo que salir por un agujero, pero que él tiene colita, y que de mayor le darán semillitas y las pondrá en la barriguita de una niña mayor, y tendrán un bebé y serán padres como papá y mamá y harán una familia como hay en casa...y el niño lo cuenta en el recreo, ¿será considerado un "cuento sexista"?

Yo quiero ser un nombre y no un número. Pero no me importan los nombres salvo que no sea Expósito que también vale pero que debe ser secreto y no confesado. Si tuviera mucha vida me la pasaría buceando en el Caribe, saliendo para fuera y para adentro, y cambiando de apellido en cada etapa porque el mío es converso.

El que predomine el apellido materno hará que se recupere el apellido de los padres que solo tuvieron niñas. Me parece muy bien porque tener mucha mujer en casa es como una condena así como tener tres hombres en casa es como tener tres demonios.

También podrían inventarse unas reglas nemotécnicas de tal manera que de dos apellidos se sacase otro parecido a los dos como hizo Balzaç o Napoleón. O que el nombre y los dos apellidos seguidos den o no una frase poética o impelidora de altos vuelos, pero que fuera en fonética catalana o castellana según el país donde actuara el actor. Así de Rubalcaba y Pajín yo sacaría Rubalcarín o Pajalbaba. También habría que echarlo a suertes ante el juez o acta notarial.

Podrían dejar el De para los segundos apellidos que acompañan al nombre así se sabría que Felipe González De Márquez, pues que el marido era de su esposa y ambos padre e hijos de la madre, si lo legisla así una jueza matrona. Claro que de ese saldría Felipe Díez.