LA REFORMA LABORAL II

No somos productivos ni competitivos ni estamos formados. Porque seguimos siendo los españoles de genio y figura. Que no vengan a alterar nuestra paz con un sinvivir. Los patrones nos tienen fichados en nómina pero ellos ganan muchísimo más. El español bien nacido no pasa por el aro de la explotación del semejante.

El trabajo es penoso, un sacrificio, produce dolor y cansancio, pero algunos logran trabajar como si fuera un juego y que todos lo pasemos bien. La función que se abandona se deteriora, hay que entrenarse, y por qué no de vez en cuando pasar de largo si nos explotan. Así también se solucionan muchos trabajos, ellos mismos por sí solos. No más que jugar...

Y a madrugar en los meses de invierno, ningún trabajo es indigno solo el trabajo mal hecho es indigno. Dicen que los españoles no queremos trabajar, que nos quejamos cuando trabajamos y que algunos piden perdón mientras trabajan. Pero el trabajo o la actividad que realizas define o conforma tu forma de ser, el rato y las horas que pasas haciéndolos.

Quan una persona viu de renda de les seves propietats i no ha de traballar. Quan un negoci no és rendible ha de plégar. Renegar es que ja no es creu en alguna idea. Una persona treballa molt a poc a poc y no fa molta feina, ja no jugue tan bé y el cansament es molt gran.

Com sempre, veuen els empresaris com a picaresca, quan hi ha una eina, que són les rátios de beneficis, que mostren bé la situació de l´empresa./ ¿Es inmediata la pérdida de trabajo por una bajada en los beneficios? La montaña rusa de los empresarios que te lanzan fuera. O crece el dinero y los beneficios, o apean a los trabajadores.

¿Cómo sobresalir de la mediocridad?¿Estamos exagerando la crisis económica?¿Supera lo verosímil la actual situación social?¿No acertamos a valorar las cosas que llenan de verdad? Otra vez el individuo egoísta"I-homo oeconomicus" contra el "homo intelectus colectivo-C".

El premio nobel, matemático y economista ruso Kantoróvich nos buscaría la función mínima que este gobierno puede dar de sí (el hambre, la secesión, la demografía baja y la despoblación, la eutanasia activa...) y luego nos atisbaría con una programación lineal la optimización que podría dar el Estado Español (capital cerebral, alta sanidad, primera potencia europea y mundial...)...y luego vendría el cabreo y los cabrones.