July 06, 2010

EL AMIGO DE CONFIANZA

I

Al ingrato con la punta del zapato.

Amigos de verdad son aquellos que te conocen bien y, a pesar de todo, te quieren.

Aristóteles decía que el amigo quiere y se alegra del bien del otro. Está muy bien que nos preocupemos por los amigos de nuestros hijos, ¿pero sabemos nosotros tener y conservar a nuestros amigos?, ¿cuál es mi concepto de la amistad?

El latoso es el que quita la soledad sin darnos la compañía (Gonzalo Torrente Ballester).

El malo se une con el malo por el placer.

El sabio uso del ocio es un producto de la civilización y de la educación.

Falta de respeto a otro, valorándole en función de lo que me pueda aportar. Eso no es valorar sino utilizar.

Hay que atender no sólo a lo que cada cual dice, sino a lo que siente y al motivo porque lo siente (Marco Tulio Cicerón).

La empatía es más que la simpatía.

La carencia de amistades y la soledad es lo más terrible.

La divinidad y la naturaleza (su espíritu) conduce siempre al semejante hacia el semejante, el grajo hacia el grajo.

La elección de la vida en común es amistad.

La justicia y la injusticia se manifiestan en relación con los amigos.

Las ideas se corroboran con sugerencias (Salomón).

La tarea de la política consiste en promover la amistad.

Las amistades son amores puros que miran más a hacer bien que a recibirlo.

Lo agradable con el tiempo se hace desagradable y no dulce. Lo agradable de manera absoluta debe definirse por el fin y por el tiempo. Como la bebida que el agrado sea continuo y no nos engañe al principio.

Los malos (desconfiados y malévolos) prefieren los bienes naturales accesorios a un amigo.

Malos amigos = desean ser amados y ser superiores a amar.

Lo que todas las personas tenemos en común no es el espíritu, sino el destino.

No aceptes, ni difundas, sin pruebas, el “rumor” de la “supuesta” conducta negativa de personas, aunque provenga de tu amigo. Si alguna vez el “rumor” es antesala de la noticia, más frecuentemente es portavoz de “maldicientes””. Éstos dice Cervantes, “los hay por esas calles como enjambres de abejas” (Don Quijote II, 5).

No hay amigos sin tiempo (confianza poner a prueba).

No pienses en lo que puedes obtener de una relación. Piensa mejor en lo que puedes aportar.

No sabemos dar las gracias a los que nos favorecen y hay muchos desagradecidos.

Nunca he encontrado un hombre de quien no haya aprendido algo.

Nunca he encontrado una persona tan ignorante que no pueda aprender algo de ella (Galileo Galilei).

Nunca se teme bastante al confiar en otro.

Pero el hecho de amar impide ser amigos de muchos al mismo tiempo, pues no es posible ser activo respecto de muchos al mismo tiempo.

Que en el año nuevo lleves la mano derecha extendida siempre para ofrecer amistad, nunca para pedir (Brindis irlandés).

Si tu corazón, como árbol frondoso, extiende sus ramas de bondad, amistad y paz, muchos pájaros buscarán en él su nido.


II

Al cual con grandísima humildad, castidad prudente e instancia ruega que él haga de manera que tú puedas pasar todo aquel día en su servicio, sin perjudicar a nadie y sin que tu bondad sea perjudicada; y que yendo amparado de piedad cristiana, te puedas escapar libre y salvo de tantas redes y lazos que por todas partes nos pone nuestro enemigo para hacernos caer.

Amigo Jorge, amigo Tareq;
pero más amiga la verdad.

Casi nadie habla en nuestra presencia del mismo modo que en nuestra ausencia.

Compadezcámonos de los amigos no con lamentaciones, sino prestándoles ayuda.

Cuando hagas favores, no los recuerdes; cuando recibas favores, no los olvides.

A todos nos gusta que nos den la enhorabuena por lo bueno que hemos hecho; pero nadie lo hace.

A todos nos gusta que nos den las gracias. Y sin embargo nosotros también nos olvidamos y somos desagradecidos.

"¿Debo confiar en un corazón sin fe, sin honor y sin razón?", se preguntaba retóricamente Napoleón. La respuesta es un no rotundo.

Donde hay mentiras no hay intimidad.

El amigo está tanto más cerca cuanto más lejos están los demás y mayor es mi desgracia. Mi amigo es la primera persona a quien yo llamaría si fuera a la cárcel, me encontrara en la mayor pobreza o me sintiera aquejado de una grave enfermedad. Mi amigo es quien más se regocija con mis éxitos y más se entristece por mis fracasos y derrotas.

El que busca un amigo sin defectos se queda sin amigos.

En un mundo hostil y ajeno la amistad se le aparece como un lazo de unión entre los hombres elegidos por su concordia y su liberalidad, un lazo personal y gozoso.

Es el espejo donde se reflejan nuestras acciones. Hay que escoger a un hombre de bien y tenerlo siempre a nuestra vista, a fin de vivir como si él nos observara y hacer todo lo que hagamos como si él nos viera. Ese observador y amistoso testigo es el amigo ideal. No la aprobación del vulgo sino la del amigo.

Es Persona-relación con los demás, "vaso comunicante", que cuando su vida se eleva contribuye a elevar la vida de los demás, y que cuando su vida desciende contribuye a descender el nivel de los demás.

Esposa-tranquilidad dentro.
Buen amigo-tranquilidad fuera.

Jamás se ha conquistado un corazón por la fuerza (Moliére).

La amistad es un riesgo, no sólo un mutuo intercambio de favores. El sabio puede también exponerse a sufrir por el amigo. La amistad es un libre compromiso. Por eso "no se ha de considerar aptos para la amistad ni a los precipitados ni a los indecisos, pues también por amor de la amistad es preciso arriegarse". Ese hermoso riesgo de la amistad es una compensación a las alegrías que procura. Aunque puedan traicionarte y hacer abuso de confianza.

La amistad no puede separarse del placer y por este motivo ha de ser cultivada, porque sin ella no puede vivirse en seguridad y sin miedo, ni siquiere puede vivirse alegremente.

La amistad proclama de que despertemos a la celebración de la felicidad.

Lo primero de la humildad es acoger al amigo; lo segundo, hacer ostensible la afabilidad; lo tercero, complacerle; lo cuarto, asistirle en la adversidad.

La relación de la amistad con la virtud.

Las cosas de los amigos son comunes.

Los ejemplos corrigen mucho mejor que las reprimendas.

Más que qué comer y beber con quienes comes y bebes. Porque sin un amigo la vida es un devorarse de leones y lobos (Séneca).

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