LA TRANSICIÓN ALTA III

Hubo un líder que no se desgastaba ni aunque lo tumbaran los propios de El PAÍS y así en la estela de la izquierda tenemos a esos líderes incombustibles hasta que se dan el morrazo con la evidencia y se quedan en casa a echarse otro cigarrillo de la transición, pero este líder nos dice que es absurdo ser líder de un pueblo con tantos males, que no hay pastor que lo soporte y déjalo correr a ver si se dan de tortas y quedan menos, luego este líder tiene la misma apariencia que un dios, que un padre que nos va a dar cera y para el pelo, porque no hay nadie que le dispute el hacer de su mano, y supliquemos que la hebilla del cinturón no nos dé de lleno, porque no es un liberal de tirantes, vamos hombre no se nombre castellano al que no es masoquista y estoico mesetario de la nacionalidad del compartir las penas con las dichas.

Juana de Santa María afirma que la República no es otra cosa que un orden de ciudadanos y ciudades, adonde entre las cuales ninguna cosa falta de lo necesario para la vida humana, y es un justo gobierno y disposición de muchas familias y de lo común a ellas y es una congregación de muchas gentes unidas y hermanadas con unas leyes y gobiernos de superior autoridad, y díganme si con los populares no nos haremos todos republicanos de derechas que no segregacionistas de izquierdas pero con esa bandera y esa Pepa no tenemos otra alternativa.

La razón de Estado lleva a dejar a los socialistas por su abyección moral al otro extremo de aparcarles fuera de las reglas del juego democrático porque han ido contra el estado de derecho dejando perderse todos los troncos río abajo y además ahora van contra el gobierno constituido que tiene que recogerlos y aserrarlos para levantar las casas de vecinos.

Había que tener la acreditación de limpieza de sangre de no haber sido socialista para impedir el acceso a los altos cargos administrativos a toda esta ralea que ha falsificado y desfalcado la nación y de haberles dejado en el pasado siglo tendríamos a los guardias rojos y al partido comunista de Lin Piao y el centro en la Unión Soviética y serían necesarios los alzamientos de los guardias civiles, e impedir la expoliación del patrimonio artístico de las iglesias parroquiales, y es importante la lineación de los colores políticos para resolver la incógnita.

De los círculos marxistas europeos surgió el leninismo y de los conciliábulos islamistas surgió Al Qeda pero me extrañaría que de las reuniones vecinales de abertzales saliera el fin del terrorismo etarra sino fuera porque un desarrollo intrínseco de la democracia vasca llevara a la extinción de los partidos independentistas y antiespañoles si a la borrachera nacionalista asesina se la puede llamar parálisis de las ideas socialistas y que el progreso no muy lejano llevara al centroderecha.

A todos nos ha dado alguna vez la vena de actuar como el patético payaso Jerry Lewis que subvierte el orden en un mundo injusto y excluyente y así de primitivos como Otegi querer hacernos con toda la bolsa del estado Hermano por medio del nacionalismo y del terrorismo pero va a ser que como Hacienda no nos devuelve la renta por eso no lloverá ni caerá esa breva benefactora para los campos.