Me ha salido un grano aquí que me duele un montón. No me gusta cómo huele mi piel. Yo no lo veo. Lo que más me gusta de ti son cinco cosas: tus manos, tu altura, tus ojos, tu culo y tu polla. Para que un Aries se queje de que le duele algo se tiene que estar muriendo. Siempre te das un golpe limpiando el cuarto del niño. Ahora un polvito y lo rematamos. Ya sé que hoy no, que hay marea roja.
No sé cómo puedes pasarte tanto tiempo en el espejo. Yo no me soporto. No puedo ni mirarme al espejo. Me repugno a mí mismo, no me acepto, no puedo ni mirarme a la cara. No al egoísta que soy, te recibo dentro de mí. Ahora estás tú, tú siempre, primero. Cuando quieras proteger a alguien ponle un acento.
Estoy inmerso en el escepticismo, en que nada vale nada. Buscaré lo que vale la pena, lo defenderé y lo cuidaré. Te quiero cariño, intentaré mantener la ilusión. Tú no puedes vivir sin mí y yo tampoco sin ti, y yo me moriría sin ti. Los invasores eran escasos y tuvieron que venir de todas partes, con nosotros, son nuestros vecinos.
Me preocupa el paso del tiempo. El tiempo es el verdadero enemigo. Lo más importante para mí ahora es cómo aprovecharlo. Es la rutina. Mis camisas me las plancho como yo quiero. Si algo se cae de una percha lo pongo en otra. Disfruto viendo tu cuerpo.
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