Si mi novia es limpia como la Virgen,/ será una madre limpia como la sangre,/ como el agua clara de la santaMaría,/ la nata rusa resultó nefasta en Iberia,/ la moderna Norteamérica hizo la mujer de goma,/ el algodón chino no veló por las niñas,/ como el azúcar y la sal cristiana de Cuba,/ y como los frutos secos de la Inmaculada Concepción.
Los santeros hacen amarres para que uno se quede muy enamorado de ti como para casarte contigo, como si todo en la vida fuera amarrar el trabajo, la pareja y la salud, y no miramos los cabos sueltos que vamos dejando como mirar por la calidad de nuestra actividad, dar mimos y masajes y corridas y venidas, y desalojar todos los vicios que como lapas se nos van acumulando como si el sí a proa implicase varios noes a popa.
Por qué se tienen que perfumar tanto porque el gineceo pueril huele a fastidio en la empresa ministerial y socialista así en El Perfume al varón le puede suceder que perdió su olor corporal al mezclarse con tanta fragancia en aquella selva de mininas con ropa y bolsas de Lomana y por eso alabo al que tiene su iglesia y su incienso como el aire de Navacerrada para descontaminarse y respirar la libertad del Olor de Eros concentrado en la ciudad.
Los varones oyama hacen roles de mujeres encarnados en los hombres actuales como limpiar, cocinar, poner lavadoras, planchar, poner la mesa y hacer las camas, hacer la compra, y limpiar el baño, el polvo, y aun sacar a la perrita, pero si flaquean en una semana las compañeras los verán como una rémora y un lastre, y si se ponen gallitamente a vociferar en contra les consideraran unos Hulk peligrosos como el hombre masa asocial a quien la ira le destabiliza y no pudiendo controlarse quiere dominar a la situación y a la fémina.
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