LAS PROMESAS DEL EVANGELIO

Es más fuerte que yo/ y no me importa que me pegues compañero/ porque no me sublevaré contra Él/ donde hay predicación hay asentamiento de bendición/ y esta fuerza solo la puede dar la santa comunión.

Pido coherencia a los llamados cristianos, coherencia del país español, coherencia local y provincial, esto implica consistencia en los capítulos del catecismo y en los estatutos de la autonomía y de las políticas, y congruencia del trazo de lo verdadero y falso en nuestro camino, y yo no soy un desvalido si sigo coherente y si mi Iglesia y mi fe tienen coherencia y el fiel y el vecino son coherentes.

El mundo sacó sus fauces más guerreras y a garrotazos y a trancazos venían a acotar las estancias de los que estaban en pacífica cohexistencia (neologismo que viene de coexistente y cohesión) porque tenían hambre de los que eran buenos y premiados por Dios por sus hechos buenos y hay que saber estar a la altura y también que no te echen la familia abajo.

Se vive solo una vez para hacer el bien y rezar por los que nos calumnian, para ofrecer la otra mejilla cuando nos abofetean, no reclamar a quien nos roba, y amar a los enemigos, y todo ello sin esperar remuneración salvo ser bendecidos por la senda de Jesús, y esto es de valientes amadores de la fe.

Dios se cobrará ojo por ojo-y diente por diente en nuestro destino por nuestras malas actuaciones, pero igualmente nuestro Dios cristiano ansía estar con nosotros criaturas y darnos el maná de la gracia y de la vida eterna, y que vayamos donde vayamos y a cada puerta que lleguemos, seamos los portadores de la paz y el amor, y para eso es necesario participar del sacramento de la Eucaristía, que es la mirilla de la luz de Dios por donde aquí en Madrid se alcanza El Cielo.

Los saduceos eran los aristócratas sacerdotales que colaboraron con los romanos y sacrificaron a Jesús y a los judeocristianos hasta que la destrucción del templo en el año 70 también se los llevó a ellos pues no creían en el pablear oral, ni en la resurrección, ni en la existencia de ángeles ni en el espíritu y llevaban una marca demoledora.

La muerte de san Juan Evangelista es lógica pero el motivo de Herodías es una tragedia de la verdad y una fruslería de su hija bailarina Salomé por eso las princesas chones son tan peligrosas para los apóstoles de Jesús cuales serpientes malvadas porque son las mujeres que casan con el poder y la ostentación y a quienes la religión les resbala.

La clase sacerdotal se redujo a los obispos y solo ellos podían confesar y solo ellos podían dar la comunión. Pero entre el pueblo había mucha gente que ya ejercía el ministerio de obispos y que llegarían a ser obispos porque eran viejos y ya no estaban atados a la carne ni al matrimonio sino a servir a Dios pero dónde había quedado la experiencia religiosa. También Hans Sachs y Alberto Durero eran amigos del ruiseñor Lutero pero su oficio era distinto y más o menos próximo al pueblo y los siete sacramentos.