LAS VACACIONES

A ver Dios, estoy de vacaciones, ven aquí y acompáñanos, que vamos a vivir estos momentos con mucho amor, mucha intensidad y mucha aventura.

Anduve y vino el cisco,/ pero después del tubo oscuro/ el alma que despierta y ve la luz,/ por fin respira y pronto empezará a volar/ si no desiste en el empeño,/ y tendrá a Dios consigo,/ aunque no le parezca cierto,/ porque no sabe lo que es,/ ni si está dentro,/ ni lo que puede,/ pero va haciendo camino/ y es de Dios quien lo quiere que sea así.

El viento me lleva y me lleva,/ en libertad,/ en la frente Dios,/ la barca española sobre las aguas/ y la llegada a un puerto de abrigo/ en mi cara se marca el viento/ y el rostro de Dios/ vuelo libre como la gaviota/ el cielo es inmenso/ el mar es inmenso/ el agua me bendice/ qué hermosa verdad/ qué hermoso el reino de los cielos/ en el mástil la cruz/ y en las velas mi cuerpo/ así voy crucificado en el corazón.

Los planes de Dios para cada uno dependen de las circunstancias, y de la bendición que les alcance, no se pueden modificar sin modificar la vida de los que nos acompañan, por eso esforcémonos en ser buenos, y hacer buenos y amorosos a los que viven con nosotros.

Dios ama el camino de los humildes, de los que no van calzados para andar, de los que dan vueltas por la vida conformados y contentos de saber que lo que presumen es porque Él está en su corazón de niño y que toda la tranquilidad que les llena es saber que siempre verán la justicia realizada.

Dios vela por su creación y esto hemos de creerlo firmemente, que Dios se preocupa porque nosotros avancemos en el camino de la belleza de sus obras consensuadas con el alma buena y no podemos rehuir la tarea, porque lo que nos manda hacer es en beneficio de todos.

Ante la presencia del Diablo/ te retiras,/ porque es enemigo,/ piensas que en revolviéndote tan sólo le herirás,/ pero que es justo por su gran poder/ el que te dé muerte,/ valiente soldado español que sólo quiere morir/ en el intento de alejarlo por un tiempo.